Crónicas

El pequeño golpe de estado en el Tolima

El pequeño golpe de estado en el Tolima

"La política es el arte de la controversia por excelencia.

La milicia es el arte de la disciplina.

Cuando las Fuerzas Armadas entran a la política,

lo primero que se quebranta es su unidad porque abre

la controversia en sus filas".

Alberto Lleras Camargo

Heredé de mi padre (Francisco Ortiz Pinzón ) la amistad con el General del Ejército César Augusto Cuellar Velandia, quien siendo Capitán fue oficial de planta en la ¨Escuela de Policía General Santander¨ para el año de 1.948, correspondiéndole comandar la compañía de cadetes que participó heroicamente en la defensa del Palacio de Nariño y del llamado Palacio de la Policía (en donde funcionaba la Dirección de la Policía ) en el cruento ¨Bogotazo¨ .

Como lo escuche de labios del Gr. Cuellar Velandia , el pelotón de Cadetes a su mando correspondían a la última incorporación que aún no habían ¨Jurado Bandera¨ y tan solo tenían tres meses de instrucción, esto hizo necesario que antes de salir de la Escuela se les diera una rápida explicación sobre el manejo del fusil y se les tomará un juramento de lealtad institucional.

Rumbo al centro de Bogotá a la altura de Matatigres, el bus fue atacado por la turba armada y enardecida y los Cadetes recibieron el bautismo de fuego y sangre … se abrieron paso atrincherados dentro del bus para llegar en defensa del Palacio de la Policía (hoy museo de la Policía (calle 9a. Carrera 9a.) el Cadete Gerardo Moncayo Barrera (5 de Enero 1.926  –9 de Abril 1.948 ), cayó abatido de un disparo y heridos de gravedad el Cadete Noel Delgadillo Parra y el Teniente Ernesto Polanía Puyo.

 EL GOLPE DE ESTADO.- El 13 de junio de 1.953 , se desempeñaba como comandante de la hoy VI Brigada en el Tolima, el Teniente Coronel César Augusto Cuellar Velandia , quien en su condición de Oficial Superior y comandante, había asistido el 22 de Mayo a la cena de gala que en la Escuela Militar de Cadetes, ofreció el Comandante General de las Fuerzas Armadas, General Gustavo Rojas Pinilla al Primer Designado y Presidente encargado (por ausencia del titular Laureano Gómez Castro, convaleciente de una trombosis) el Dr. Roberto Urdaneta Arbeláez, para ratificarle su irrestricto apoyo, incluso se le había mandado confeccionar el uniforme de General, que a última hora el Dr. Urdaneta cambio por el civil “frac“ . Esto obligó al oferente a modificar  el  saludo en  la  introducción para decir : “Para comenzar este discurso pongo en vuestras manos el Bastón de Mando, símbolo de vuestra autoridad militar y os pido aceptar el uniforme que en próxima ceremonia especial os entregaremos“ ….

En otras palabras el homenaje tenía un doble sentido y fue interpretado como el desconocimiento de la autoridad del presidente titular Laureano Gómez, con quien el General Rojas tenía irreconciliables diferencias.

IBAGUÉ.- Ese día (13 de junio), a eso de las 7 de la mañana, el Tte. Coronel Cuellar Velandia, militariza la ciudad, dispone el acuartelamiento de la Policía y se traslada con su Estado Mayor, al despacho del Gobernador del Tolima el Dr. Gilberto Polanco Martínez. El  saludo es cordial hasta cuando el Coronel Cuéllar procede a notificarle que: El es el Jefe Civil y Militar del departamento del Tolima y por lo tanto el doctor Polanco queda relevado de sus funciones como gobernador. En un principio el dr. Gilberto Polanco, tranquilamente toma a broma la actitud del Coronel Cuellar Velandia, pero al ver la postura, no violenta pero si radical, le manifiesta su extrañeza y le dice: "Cesar Augusto, no entiendo que es lo que te pasa, estoy regresando de Bogotá de hablar con el Ministro de Gobierno quien me ratificó su total apoyo". El Coronel Cuéllar Velandia explica:  “Gilberto, quiero informarte que la presidencia de la república la asumió mi General Rojas Pinilla". Confundido el Gobernador ordena a la secretaria que lo comunique con el Ministro de Gobierno y proceden a prender un vetusto radio que está dando una primicia: el Presidente titular Laureano Gómez acaba de asumir el cargo.

Se convence Coronel, "¿qué más quiere?" manifiesta el gobernador Polanco. Hay desconcierto entre los militares.

BOGOTA.- El Sábado 13 de Junio pintaba para ser un tranquilo y ameno fin de semana: El presidente Roberto Urdaneta , reposa en su residencia de una fuerte gripa, el General Rojas Pinilla sale a temperar a su finca de Melgar.

 Laureano Gómez llama al presidente encargado y le ordena que debe disponer el retiro inmediato del General Rojas Pinilla (a quien hace responsable de la detención y tortura del industrial Felipe Echavarría Olózaga). Roberto Urdaneta se niega argumentando que según la investigación el General Rojas no tiene responsabilidad en nada y le manifiesta que si es del caso asuma la presidencia. Efectivamente, Laureano Gómez reasume como presidente (titular) y convoca a un consejo de ministros, en donde presenta el decreto de retiro del General Rojas Pinilla. El Ministro de Guerra Lucio Pabón Núñez, se niega a firmar el decreto y renuncia al ministerio. El Presidente Laureano Gómez, nombra como Ministro de Guerra al dr.  Jorge Leyva Urdaneta y como Comandante General de las FF.AA. al General Régulo Gaitán, quienes se desplazan acompañados de los generales Mariano Ospina Rodríguez y Gustavo Berrío Muñoz, hacia el Batallón Caldas, para efectos del reconocimiento de las tropas.

El golpe en el Tolima

IBAGUÉ.-  La Radiodifusora Nacional, anuncia el nombre de los nuevos Ministro de Guerra y Comandante General. El Gobernador Polanco Martínez se muestra complacido y en una jugada diplomática le dice al Coronel Cuellar Velandia: “ Aclarados sus equívocos, este Gobernador, invita al Comandante del Batallón para que almorcemos en el Círculo Social". Cuellar Velandia capta que la pretensión del Gobernador Polanco es sacarlos de la Gobernación y réplica “Gracias Guillermo, pero para poder brindarte la seguridad que mereces almorzaremos en este mi despacho de comando. El Jefe de Estado Mayor discretamente le susurra a Cuellar: “Mi Coronel, las cosas no salieron como se esperaba, ¿ahora qué hacemos?" La respuesta fue inefable: “Con el almuerzo, mande traer una botella de Whisky, no la tomamos y decimos que estábamos borrachos, pero por ahora de aquí no sale nadie!!!".

Se configura el golpe

BOGOTÁ.- El General Alfredo Duarte Blum, alerta al General Rojas Pinilla y envía un avión para su regreso a Bogotá, en donde se dirige directamente al Batallón Caldas, del que era comandante el Coronel Navas Pardo . Allí se entera de todos los pormenores y se entrevista con Doña Bertha Hernández de Ospina Pérez, quien le brinda el apoyo del partido de gobierno.

A estas alturas hacen su arribo al Batallón Caldas el recién nombrado Ministro de Guerra Jorge Leyva con los nuevos comandantes y son recibidos con los reglamentarios honores de la guardia (para generar confianza). Ya en el Casino de Oficiales, son sorprendidos con la presencia del General Rojas Pinilla, quien ordena su inmediato arresto. Simultáneamente el Secretario General del Ministerio de Guerra Coronel José Manuel Agudelo, comunica a todos y cada uno de los comandos militares que: “A partir de ese momento solo se aceptarán órdenes del General Gustavo Rojas Pinilla".

Es evidente que todo este movimiento fue en principio para mantener al General Rojas Pinilla como como Comandante General y al Dr. Roberto Urdaneta como Presidente de la República.

Rojas Pinilla se dirige al Palacio de Nariño para requerir al Dr. Roberto Urdaneta que asumiera, con su apoyo, la Presidencia. El Dr. Urdaneta se niega y condiciona su aceptación a la previa renuncia del Presidente Laureano Gómez. El general Rojas ordena la búsqueda del Dr. Gómez, sin lograr encontrarlo.

Hay consenso de los presentes en Palacio para derrocar a Laureano Gómez. Rojas Pinilla se muestra indeciso, para asumir el poder al punto que el Comandante de la Fuerza Aérea, el Coronel Alberto Pauwels se exaspera y le increpa “Lamento mucho mi General, pero usted se toma el poder o no lo tomamos nosotros, porque de aquí en adelante nos van a joder a todos y al país". Rojas Pinilla le insiste al Dr. Urdaneta, pero este es enfático en su negativa y se retira a un salón contiguo con el Dr. Mariano Ospina Pérez. Lucio Pabón Nuñez, se encara al General y le dice: "Aquí no hay alternativas, tienes que asumir el poder".  Da media vuelta se dirige al salón en donde se encuentran Los Drs. Urdaneta y Ospina,  anunciando :  “ El General Rojas Pinilla acaba de asumir el poder, debemos darle nuestro apoyo”. Entran al salón en el que se encuentra el General Rojas Pinilla y como un hecho cumplido lo aplauden y le manifiestan su respaldo.

Los dos golpes

En síntesis el 13 de Junio de 1.953 el país tiene tres Presidentes: Roberto Urdaneta, Laureano Gómez y Gustavo Rojas. Dos Comandantes de las FF.AA. : Gustavo Rojas y Régulo Gaitán; dos Ministros de Guerra: Lucio Pabón y Jorge Leyva; y en el Tolima dos Gobernadores: Guillermo Polanco y Cesar Augusto Cuellar.

IBAGUÉ.- La “campana"  de la llamada anunciando el mando exclusivo del General Rojas “salvo“ al Coronel Cuellar Velandia, quien luego de enviar a su casa al “exgobernador Polanco“, procede a nombrar el gabinete :los Drs. Eduardo Alzate García; José Ramírez Castaño; el Presbítero Carlos Restrepo Jaramillo ( secretario de Educación) ; el Mayor Suárez Pinzón y el capitán Delgadillo (Secretario General ) . Al día siguiente se traslada al Palacio Episcopal para presentar su saludo a la primera autoridad Eclesiástica, el Obispo Pedro María Rodríguez Andrade, personaje algo sectario y furibundo partidario de Laureano Gómez; quien desafía al Coronel Cuellar y le increpa “¿A usted quien lo ha nombrado Gobernador del Tolima?” …“ El Presidente de la República, mi General Gustavo Rojas Pinilla“, responde Cuellar …“ ¿y a su tal General Rojas quién lo ha nombrado presidente? Ese es un usurpador y usted es un usurpadorcito y no me venga a pedir mi bendición de apoyo, los usurpadores, cual ladrones solo merecen absolución cuando restituyen lo arrebatado".  “Monseñor vine a saludarlo y tampoco de eso me arrepiento y continuó siendo su ferviente feligrés“, respondió el Coronel y se retiró.

La gobernación del Coronel Cuellar Velandia fue la de mayores realizaciones en el Tolima; entre otras se cuentan: La Universidad del Tolima; El edificio de la gobernación; el cuartel de la Policía; la liberación del municipio de “Agua de Dios” (que era una zona vedada y de no retorno, únicamente para los enfermos, considerados vergonzantes); la creación del Deportes Tolima,  las instalaciones de la VI Brigada; varios puentes y carreteras así como el estadio que a través de los años ha cambiado de nombre. Inicialmente fue la “Cancha Serrano de Ávila"(antiguo dueño del terreno). Construidas las tribunas se le llamó “Rojas Pinilla”. Después de la caída del General, fue el “ San Bonifacio de Ibagué “ y actualmente  “ Murillo  Toro ”.

(*) Capitán en uso de buen retiro de la Policía.

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