Por Óscar Viña Pardo. 

Con la cancelación del Jamming, evento musical más importante del año en Colombia y que iba a realizarse este fin de semana en la capital musical de Colombia, se habla de no circular en Ibagué más de 75 mil millones de pesos, recursos calculados por la Cámara de Comercio. Ahora, la cifra se revierte y hablamos de pérdidas millonarias para nuestros emprendedores, inclusive de otras ciudades y hasta de Bogotá.

Debo reconocer que la Alcaldía de Ibagué se movió rápido y ese es el deber ser de una administración local, brindar las herramientas necesarias para que la ciudadanía tenga la oportunidad de salvar algo o mucho de lo invertido en esta ocasión. 

Pero es poderosa la solidad del ibaguereño, quiere comprar, quiere apoyar los emprendimientos de la gente, y eso demuestra que no existe color político, que las banderas son los nuestros. Una ciudadanía golpeada una y otra vez con grandes eventos resilente que quiere en esta ocasión mostrar el talante de lo que somos, y eso es de aplaudir. 

A quienes nos visitan y no se fueron, sino que le apostaron a quedarse, no se queden con el turismo de vitrina o centros comerciales. Ibagué tiene una oferta cultural este fin de semana envidiable. El solo Festival Nacional de la Música Colombiana es un pasaboca exquisito dentro de esa riqueza musical de nuestros aires o ritmos. 

Ni qué decir de la oferta eco turística, o turismo de aventura. Los invitamos a indagar en las redes sociales, a descubrir las bellezas como el Museo de Arte del Tolima, o el Orquidiario; los centros recreacionales de Comfenalco, Comfatolima, Parque del Arroz y tantos otros lugares atractivos que tiene la ciudad.

Los invitamos a que sea parte de estos ibaguereños solidarios y no hablar mal de una ciudad que no tiene la culpa de la suerte de los empresarios de este evento, que a pesar del daño hecho quiere pensar que entre todos podemos salir adelante.