Blanca Ávila de Barragán había nacido el 10 de diciembre de 1919. Junto a su compañero de vida, otro ejemplo de lucha, Euclides Barragán, forjó una familia con un arraigo especial: amor, rectitud, honestidad y trabajo con disciplina y responsabilidad.

Su deseo y esfuerzo permanente giraba en torno a mantener unida a la familia, eso le proporcionaba gran satisfacción. Tuvo 12 hijos, 25 nietos y 18 bisnietos. Otra de sus hijas, la reconocida abogada y en su momento líder política del norte del Tolima, Fanny Barragán, con motivo del cumpleaños número 100 de doña Blanquita, como cariñosamente todo el mundo la llamaba, escribió que “Su mayor legado: su fortaleza, su capacidad de transmitir amor y mantener por encima de todo la unidad familiar. Matrona de matronas soporte y columna vertebral de este fuerte árbol genealógico que solo se fragmentó cuando fallecieron 3 de sus 12 hijos”.

                                                       Blanca Ávila de Barragán, en 2019 en su cumpleaños número 100.

Señaló también la hija Fanny ese 10 de diciembre de 2019 que “Durante 60 años fue esposa y compañera de mi padre, conformando una bella pareja sostenida en el tiempo gracias al inmenso amor, alimentado por el respeto, el cariño y el coincidir en sus sueños y proyectos”.

Recordó ese día que “Este par de coequiperos construyeron con dedicación, amor y trabajo, una poderosa empresa familiar que hoy se mantiene incólume, gracias a su sabiduría, dedicación y templanza”.

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                                                                             La matrona Blanquita rodeada de sus hijos.

Fanny Barragán también cuenta una anécdota histórica y es el encuentro que tuvo doña Blanquita con otra gran matrona del Líbano, Gloria Inés de Pardo, el 2 de octubre de 2016, día en que se votó el plebiscito por la paz. “Estas dos matronas  votaron por el Sí, para que sus hijos, nietos, y bisnietos puedan ver un país diferente. Son ejemplo de vida, de paz y no de guerra y desolación”, escribió Fanny Barragán Ávila.

“Haz cumplido tu misión y tu tarea con creces”, es la voz sentida de sus hijos, nietos y bisnietos.

                                                                               Doña Blanquita con Gloria Inés de Pardo